¿Cómo reciclar?
Esta es una pregunta muy común.
En nuestra experiencia no sólo nos hemos encontrado con todo tipo de empresas con dudas sobre cómo proceder con los diferentes residuos que generaban, sino también muchos comercios urbanos y particulares nos preguntan qué hacer o dónde llevarlos.
Lo primero que hay que tener en cuenta, y muchas veces no es así, es que los residuos no son basura: en la actualidad existen muchos procesos de reciclaje que proporcionan valor a los residuos y pueden darles una segunda vida.
Lo segundo es que muchas veces el reciclaje conlleva una dificultad: hay que separar los residuos según el material, hay que llevarlos a diferentes contenedores o puntos limpios, hay que habilitar espacios en nuestros hogares o empresas,…
Pero si queremos una sociedad sostenible y estamos concienciados con el Medio Ambiente, esta pequeña incomodidad será asumible sin problemas.
Para tratar el tema de qué hacer con los residuos, vamos a verlo desde 3 puntos de vista, que son los principales productores de residuos: el particular o ciudadano, el comercio urbano y las empresas o industrias.
Residuos domésticos
La nueva ley de reciclaje estableció esta denominación para todos los residuos generados en los hogares como consecuencia de las actividades domésticas.
La gestión de estos residuos es competencia de las Entidades Locales o las Diputaciones Forales, esto es, es el ayuntamiento de la localidad el que debe proporcionar estos servicios.
En los hogares se generan una gran cantidad de desechos, tanto no peligrosos como tóxicos y peligrosos, y por suerte podemos contar con la posibilidad de una correcta gestión.
En el post de cómo reciclar la basura vimos una lista con los residuos más comunes y dónde llevarlos.
Básicamente tenemos dos opciones como particulares:
- No separarlos y juntarlos
- Separar los residuos
En el primer caso se junta toda la basura en una misma bolsa y se lleva al contenedor urbano general o de restos, de color gris o verde usualmente.
En el segundo caso, el ayuntamiento nos proporciona varios contenedores para su reciclaje:
Para los residuos no peligrosos:
En la calle nos encontramos con el contenedor azul (papel y cartón), el contenedor amarillo (envases), el iglú verde (vidrio) y en algunas localidades el contenedor marrón (para la fracción orgánica).
Para todos los demás desechos mezclados, van al contenedor de restos (gris o verde oscuro)
Para los residuos tóxicos o peligrosos:
También disponemos en cada localidad de un punto limpio o ecoparque, que sirve para recoger todos los residuos tóxicos y peligrosos que no deben ir en los contenedores urbanos (cargadores, pilas, envases de pintura, sprays, neumáticos, fluorescentes,…
Aquí hay un post sobre los ecoparques con los residuos que admiten.
Como vemos el primer caso se más sencillo y cómodo, pero mucho dificulta el reciclaje de los residuos.
El segundo caso nos exige un trabajo extra, pero los beneficios son sustanciales.
Residuos comerciales
Son aquellos generados por la actividad propia del comercio al por mayor o al por menor, de los servicios de restauración, de las oficinas y del resto del sector servicios.
En este caso nos encontramos con dos tipos, de manera similar al caso de los domésticos:
Residuos no peligrosos:
Los comercios tienen dos posibilidades:
- Gestionarlos por su cuenta, contratando su gestión con un gestor autorizado de residuos
- Acogerse al sistema público de gestión, en los términos que establezcan las ordenanzas de las Entidades Locales (contenedores urbanos y ecoparques)
Residuos peligrosos:
Cuando se trate de residuos tóxicos o peligrosos dependerá en gran medida del tipo de residuo, su cantidad y lo establecido por las Entidades Locales.
Hay que tener en cuenta que estos residuos son altamente contaminantes y su buena gestión es fundamental.
Para estos residuos hay dos posibilidades:
- Contratar a un gestor de residuos autorizado para la gestión y tratamiento de los mismos.
- Acogerse al sistema público de gestión de residuos, si es posible (ecoparques)
La responsabilidad de los productores de residuos peligrosos comerciales concluye al entregarlos en los términos previstos en las ordenanzas o cuando el gestor de residuos acredite documentalmente su recogida y tratamiento.
Residuos industriales
Son aquellos resultado de los procesos de fabricación, transformación, utilización, consumo, limpieza o mantenimiento generados por la actividad industrial.
Los residuos industriales se generan en gran cantidad y son muy variados. La mayor parte de los residuos peligrosos generados vienen de este sector.
Es muy importante una correcta gestión de residuos en este sector, ya que no sólo posibilitará una mayor protección al Medio Ambiente, sino que las empresas tienen la posibilidad de recibir beneficios al hacerlo.
Los productores de residuos industriales, ya sean peligrosos o no peligrosos tienen dos posibilidades:
- Realizar el tratamiento por sí mismos
- Encargar el tratamiento de los residuos a un gestor de residuos autorizado
A destacar la jerarquía de residuos, un criterio que hay que respetar que indica por orden de preferencia qué tratamiento hay que dar a los residuos. Más información aquí
- La responsabilidad del productor de residuos concluye cuando los entregue a un gestor autorizado y este acredite documentalmente su gestión.