Cuando apareció de la nueva ley de residuos en el año 2011 se especificaba en su artículo 8 cuales eran los mejores destinos para ellos, siendo por orden de preferencia:
- Prevención de residuos
- Preparación para su reutilización
- Reciclado
- Otros tipos de valorización
- Eliminación
Como podemos ver, las administraciones señalan como prioritario y preferible algo con mucho sentido común pero que a veces no se le presta demasiada atención: la prevención de residuos.
La pregunta es que cuantos residuos de los más de 80 millones de toneladas que se generaron sólo en España en 2011 se podrían evitar sin mayor esfuerzo que un poco de conciencia.
Actualmente se disponen de numerosas técnicas y máquinas para reciclar prácticamente cualquier desecho, pero lo interesante de esto es que todos estos esfuerzos podrían ser menores si desde un principio se implantaran técnicas de prevención.
Para promover estas ideas se instauró la «Semana Europea de Prevención de Residuos», un proyecto europeo que cuenta con el apoyo del programa +LIFE de la Comisión Europea y tiene como objetivo principal difundir el concepto de prevención evidenciando el impacto ambiental de los residuos y en el cambio climático.
Toda esta comunicación se estructura en torno a 5 grandes temas:
1. Exceso de residuos. La sociedad actual produce demasiados residuos y son inasumibles, contribuyendo negativamente al Medio Ambiente, a la sociedad y a la economía.
2. Producción mejorada. Todos los procesos tanto al fabricar productos como en cualquier actividad económica deben ser revisados bajo el prisma de la prevención de residuos.
3. Consumo racional. Fomentar un comportamiento responsable en la compra, favoreciendo aquellos diseños sostenibles, compras a granel y otras.
4. Mayor vida útil. De los productos, impulsando la reparación de los mismos y las donaciones.
5. Menos desechos. Mejora en los hábitos cotidianos, evitando el despilfarro de alimentos.
3R
Sobre este tema hay una idea más difundida, y es la «Regla de las 3 erres», que consiste en una propuesta sobre mejores hábitos de consumo, ya que es desde aquí donde se pueden demandar y conseguir mayores logros.
Esta idea se basa en las 3 erres, que son: Reducir, Reutilizar y Reciclar.
- Reducir
Medidas sobre la importancia de reducir los residuos, tanto los que se producen en origen del producto (fabricación y distribución) como el final (consumo y desecho).
- Reutilizar
Medidas sobre la posibilidad de dar a los productos una segunda vida, promoviendo la reparación en lugar de la compra de nuevos, o en la donación/intercambio de los mismos.
- Reciclaje
Medidas sobre la clasificación y separación de los residuos en los hogares y llevándolos a los lugares correspondientes: contenedores urbanos, puntos de recogida especiales o ecoparques.
¿Cómo prevenir los residuos?
La reducción de residuos puede ser de dos tipos: cuantitativa (cuando se centra en el volumen) y cualitativa (cuando se centra en las sustancias contaminantes de un producto).
Una adecuada política de prevención debe tener un enfoque generalista y abarcar todo el ciclo de vida de un producto: diseño, fabricación, distribución y consumo. De este modo se conseguirán los máximos beneficios.
- Residuos orgánicos
Con estos residuos el principal problema es el enorme consumo de alimentos y la enorme producción de residuos derivados de ellos, sobre todo restos de alimentos, envases y plásticos.
Las posibles medidas estarían centradas en una compra responsable y racional, una demanda de productos con menores sustancias contaminantes y envases ajustados, además del aprovechamiento de los excedentes alimentarios, bien a través de donaciones o compostaje particular.
- Envases
El gran número de residuos de envase pueden disminuir demandando productos con envases menos pesados, reducción de las sustancias usadas en los mismos, envases fácilmente separables para facilitar su reciclaje y fomentar la compra a granel.
Utilización de embalajes reutilizables.
- Neumáticos
Las medidas en este sentido se centran en una adecuada conducción: presión correcta de los neumáticos y conducción moderada sin frenazos ni aceleraciones bruscas. El objetivo es alargar la vida útil de estos productos sin poner en riesgo la seguridad.
- Papel y cartón
Estos productos forman parte de nuestra vida y son muy numerosos. Ha experimentado un notable ascenso la generación de estos residuos, debido principalmente al uso en oficinas, fines comerciales y embalajes.
Se aboga por un consumo racional en las oficinas: imprimir lo imprescindible y a doble cara y compra responsable observando el gramaje y el origen,
Respecto a los libros fomentar el intercambio, donación y alquiler, así como libros digitales. Sobre los usos comerciales y publicidad en buzones destacaría una regulación más estricta de estas actividades.
- Textil y calzado
Un consumo responsable: con la adquisición de productos duraderos que no pasen de moda, sustituir los productos para ocasiones puntuales (como vestidos de fiesta,…) por productos de alquiler, productos ecológicos con materiales naturales y alargar la vida útil de los mismos atendiendo a las indicaciones de lavado, planchado y secado del fabricante.
La reutilización y segunda mano destaca con estos productos y está extendida: se pueden donar a organizaciones para que se las den a personas necesitadas, o a familiares y amigos de la persona. Existe un mercado de segunda mano donde se pueden vender y comprar.
- Pilas
Con respecto a estos residuos, lo único es sustituir las de un sólo uso por otras recargables.
- Aparatos eléctricos y electrónicos
Prevenir estos residuos es posible fomentando su vida útil y reparando los productos averiados en lugar de tirarlos y comprar nuevos.
En caso de cambiar de producto por actualización, vender o donar el viejo.
El vídeo es de una edición anterior: